El arbusto.

No era jazmines ni orquideas, tampoco una perfumada rosa, no era un almendro en flor, tampoco un olivo lleno de frutos, ni siquiera alguna planta aromática como el tomillo o romero.

 Allí estaba en medio del desierto, había crecido desprotegida, los fuertes calores la abrazaban, el viento la sacudía con fuerza, los crudos inviernos la cubrían con un manto de nieve, si ella pudiera hablar nos diría así: ¡Que aislada estoy de la sociedad! no crecí en el palacio del rey para que me cuidaran, nunca he pasado por las manos de un experto jardinero para que me hermosee. Dicen de mi que cuando comienzo a crecer y mis brazos se extienden hacia varios lados, soy una plaga, hago daño, mas de una vez quisieran eliminarme, cuando veo venir a los pastores con su rebaño comienzan a gritarles para que no se acerquen porque dicen que les puedo lastimar. Ni un pajarito me hace compañía, sobre mi no pueden hacer sus nidos, por eso ni se acercan, tengo unas pequeñas flores y luego doy un fruto que cuando lo quieren tomar lo hacen con mucho cuidado y no dejan de exclamar que los lastime con mis punzantes espinas. Yo soy la zarza!!!!! que desafortunada soy, nadie me tiene en cuenta!!!!Por este desierto nunca nadie aparece! que sola estoy!

Paso el tiempo y allí seguía la zarza en medio de la nada. 

Sucedió un día que un pastor de ovejas llevaba el rebaño a través del desierto, llego hasta una montaña cuando ve a lo lejos una llama de fuego,la curiosidad lo llevo a ver que pasaba, grande fue su asombro cuando ve una zarza prendida , ardía, ardía y no se consumía. Pero como allí en la soledad estaba ardiendo????

 Siguió acercándose, cuando oye la voz de Dios que sale de adentro de la zarza y le dice: El lugar en donde estas es santo, quitate el calzado, te voy a dar instrucciones de lo que vas a hacer de acá en mas, he oído el clamor de mi pueblo y te enviare para que seas su libertador!! Y la zarza seguía ardiendo!

 Que cambio, de haber sido un arbusto insignificante paso a hacer un instrumento de valor. Fue usada para que la gloria de Dios se manifieste en ese lugar.

 Han pasado cientos de años de este acontecimiento sin embargo todavía se habla de la zarza ardiente.

 Nunca te sientas de poco valor, no digas que eres poca cosa, no te lamentes por tu condición. Deja que Dios fluya a través de ti y seras una zarza ardiente!!!!

El regreso !

Caminaban cabizbajos. Venían de la gran ciudad, llevaban en su interior una mezcla de dolor y decepción. Que largo se hacia el camino! Muchas veces habían recorrido el mismo trecho pero ahora era distinto. Cuantas veces hicieron los mismos kilómetros que los separaba de esa bonita ciudad, con gozo, con animo, con esperanza, ahora las circunstancias eran diferentes, las cosas habían cambiado, les embargaba una gran pena, parecía como que hasta el corazón les dolía; muchas veces nos identificamos con estas personas, nos sentimos solos, defraudados, tristes, desilusionados.

 Querían llegar cuanto antes a la casa, necesitaban descansar, poner en orden esas ideas que venían a atormentar la mente, tal vez si lograban conciliar el sueño, se iban a sentir mejor, las esposas tendrían el baño preparado, una buena ducha los relajaria; siempre y cuando ellas no hagan muchas preguntas.

 Los vemos caminando agobiados, hasta parece que caminan doblados por la angustia que llevan. Las piernas pesan y los pasos se hacen lentos.

 ¡Que distinto había sido un tiempo atrás! La conversacion no era la misma de ahora. Todo se había desplomado. Y siguieron la marcha, que desilusión!!!! la persona en la cual habían depositado su fe y confianza había fallecido. Estaban confundidos, en vez de darse animo uno al otro los oímos por momentos discutiendo.

 Otro caminante se le suma a la marcha, se les pone a la par y como los ve tan apesadumbrados les pregunta ¿Que les pasa? ¿Porque están tan tristes?. Los dos no tienen ni fuerza para levantar el rostro, y mientras siguen caminando uno responde: ¿ Eres tu el único que no sabe lo que ha pasado en estos días? ¿ eres forastero? ¿ no sabes las cosas que han pasado? ¿¿ Que Paso??

 Y lo que aconteció con un profeta de Nazaret llamado Jesús. Todos veíamos como actuaba ¡que poder! ¡era Dios mismo haciendo maravillas! pero no creyeron en El y aun lideres nuestros lo han entregado y lo crucificaron. Nosotros esperábamos que El fuera el libertador de Israel, pero ya hace tres días que murió, para colmo esta mañana nos pegamos un gran susto, cuando unas mujeres de nuestro grupo nos dijeron que fueron a la tumba, pero no lo encontraron, solo vieron ángeles diciendo que El estaba vivo!!! entonces unos compañeros corrieron a ver , pero cuando llegaron al sepulcro no encontraron nada!!!!

 El forastero respondió: ¿No sabían ustedes que el Mesías tenia que sufrir y padecer antes de subir al cielo para reinar? y siguió hablándoles de Moisés, de los profetas, de todas las promesas y su cumplimiento.  Y así conversando llegaron al pueblo. Ya la tarde iba declinando, comenzaba a oscurecer, era tarde.

 No es bueno que sigas el camino de noche, quedate a cenar con nosotros y descansa, cuando sea de día te vas, el forastero acepto la invitacion.

 Cuando se sentaron a comer el visitante tomo el pan y dio gracias a Dios, lo partió y se los dio a ellos. ¡¡¡¡¡Esas manos!!!!! eran las mismas manos que ellos habían visto acariciando los niños, las mismas que multiplicaron los peces y el pan, las mismas que sanaban los enfermos. ¡¡Esas manos fueron abiertas en la cruz del Calvario y traspasadas por los clavos!!  Ahí fueron abiertos sus ojos. Pero El ya no estaba, Jesús había desaparecido. Cuantas veces tu y yo estamos en la misma situación de estos dos hombres, el trajín de la vida, los reveses, los problemas, no nos hacen ver a Jesús que esta a nuestro lado, camina junto a nosotros, se sienta en la misma mesa.

 Nuevamente estos hombres emprenden el camino de regreso a Jerusalén, van contentos, con animo, con esperanza.Tienen que darle a los compañeros las buenas noticias. ¡¡¡Jesus vive!!! ¡¡¡Jesus ha resucitado!!!  Un párrafo de un viejo himno dice: Quedate Señor ya se hace tarde, te ofrezco el corazón para morar, hazlo tu morada permante Aceptalo!!Aceptalo mi Salvador.

Fiesta en la estancia!!!!!!!

¡A vivir la vida!!!!! Eso fue lo que dijo y con maleta en mano se marcho!!!!, tenia los bolsillos llenos de dinero y eso le iba a dar la posibilidad de disfrutar!! Buenos hoteles, muchos paseos, buena ropa, sabrosa comida!!!!!!. Se fue bien lejos de su casa , donde nadie lo conozca. Los recursos economicos

era excelentes así que nada le iba a faltar.
 Se instalo en el mejor hotel. Pronto comenzo a cosechar un montón de amigos. Para este muchacho era otro mundo! ¡Todo nuevo! y pensaba: ¡Como tarde tanto tiempo de vivir todo esto!
 ¡Que bueno era estar lejos de la familia!!!no escuchar los rezongos de papa!!!!
La familia de este joven era acaudalada, bien constituida, y organizada.  Pero el quería libertad!!!!!
 No quería estar atado a ellos, parece que este muchachito era bastante impulsivo y no sabia esperar los tiempos.  Fue eso lo que lo impulso a pedirle a su papa que le de en efectivo la parte de su herencia ¿porque tenia que esperar que el padre se muera para disfrutar de los bienes? Y.....tanto insistió que lo logro.
 Y allí estaba disfrutando de todo lo nuevo! Ni se acordaba de su familia, nunca manda ni una noticia por lo menos para que sepan que estaba vivo.
No se si fueron algunas malas ,juntas o que habrá sido, pero este jovencito comenzo a vivir una vida desordenada, ya no era aquel muchacho de bien, que había salido hacia un tiempo de la casa paterna, el dinero se iba como agua, no podía invitar tanto a los amigos a comer afuera o mandar la ropa a la lavandería para tenerla impecable. El dinero comenzo a escasear y como a veces pasa cuando no hay plata tampoco hay amigos, uno a uno se fueron dejándolo solo. Para peor allí en ese país comenzo a escasear el trabajo y llego el hambre. Lo vemos deambulando por las calles buscando trabajo, todas las puertas están cerradas. Se acerco a una persona que tenia campo y le pidió por favor que le de algún trabajo, alguna cosa para hacer porque no tenia ni para comer. Tanto que le rogó que le dijo que lo iba a mandar a darle de comer a los animales y allí lo vemos cuidando cerdos ¿Cerdos?????
 Por lo menos lo hubiera mandado a pastar ovejas o cuidar el ganado. ¡No! ¡¡¡¡Cerdos!!!!
 Nunca en su vida había entrado a un chiquero!!! era tanto el hambre que tenia que cuando le daba las algarrobas a los cerdos deseaba comerlas, ni eso podía hacer porque no se lo permitían.
 El algarrobo de Palestina era adecuado para cerdos, no para seres humanos, aunque de su fruto comían las personas menesterosas.
Se acordó de la estancia de su padre! de los trabajadores que tenia! ¡Que abundancia de comida!
 Los jornaleros después del día de trabajo llegaban a sus hogares y compartian con sus familias de una apetitosa y saludable cena.
Para sus adentros dijo: No puedo mas, que error que cometí, voy a regresar a la casa, le pediré perdón a mi papa y le diré que no me reciba como a un hijo que aunque sea me acepte para trabajar.
 Y lo vemos comenzando a caminar hacia la casa. ¡¡¡Irreconocible!!! Nadie puede decir que es aquel hacendado caballero, tan elegante, tan bien vestido, con tanta arrogancia! esta sucio, hambriento, andrajoso, harapiento. ¡¡con olor a chiquero!!
 Ya esta en el portón de la estancia!. A pesar de su estado calamitoso, su padre lo reconoce, corre con los brazos extendidos a recibir a su hijo, no ve en que condición llega, el amor de padre no le hace ver los harapos, ni siente el olor a cerdos.
 Perdón papa, me porte mal, ofendí a Dios y a ti. El padre no deja que siga hablando, con voz fuerte llama a los sirvientes, les dice que preparen un buen baño, que traigan la mejor ropa, el mejor calzado y coloquen en su dedo un anillo (el anillo era de sello con los blasones de la familia) (la identificacion)
 Vayan al corral, maten el becerro mas gordo preparen la casa para una gran fiesta!!!! Mi hijo ha regresado!! estaba perdido y lo hemos hallado! estaba muero y ha revivido!
 Con estas sencillas palabras Jesús hablaba a las gentes, para que entiendan, que el Padre Dios esta con los brazos abiertos recibiendo a todos los que reconocen que son pecadores y están lejos de El.
 El quiere sacarte los harapos del mundo, y colocarte un nuevo vestido, símbolo de justicia de la nueva naturaleza, darte el nuevo calzado, símbolo de apresto del evangelio de paz, para que puedas caminar cómodo y seguro , y poner en tu dedo el anillo que te identifica que eres hijo de El.
 El muchacho de esta historia llego andrajoso, y recibió nueva ropa, llego descalzo y fue calzado, vino sin identidad y recibió la identificacion de hijo!!!!!
                                                             
                                                                  ¡Hubo gran fiesta en la estancia!!!!!!!!!!

Aromas de nardo fino!!!!!

¡Lo había logrado! ¡Lo tenia en su mano!!!!!¡Que contenta estaba!!!!!¡Tenia el frasco de perfume que tanto había soñado! Un perfume carisimo, de un alto valor económico!, lo observaba con mucho cuidado para que no se le resbale, estaba bien cerrado y lacrado, para que su fragancia se mantenga intacta y que nada de lo exterior se introduzca en el frasco y pueda cambiar su bellisimo aroma.

 Entro en su casa, fue a su habitación y lo guardo entre sus cosas mas queridas, bien resguardado para que ninguna mano lo toque.

 No era un perfume para usarlo todos los días, le había costado meses de ahorro, y aun sueldos enteros para poder adquirirlo, ya se iba a presentar la ocasión para usarlo, tal vez alguna fiesta muy importante, o algún acontecimiento de gran trascendencia.

 A medida que pasaba el tiempo iba de vez en cuando al lugar donde lo tenia guardado, lo miraba, estaba tan contenta de ser la poseedora de algo tan bello.

 Era para ella de gran valor, posiblemente lo mas valioso que tenia.

 Pero cierto día esta mujer hace algo raro, va a la habitación, con mucho cuidado toma el frasco, lo esconde entre sus ropas y sale de su casa.  La vemos caminando por las calles de la ciudad.

 Su paso es presuroso, evita tener contacto con algún vecino, sabe que no es querida, la sociedad la discrimina por la vida que lleva, sigue su andar sin detenerse.

 Esa mañana se entero que a la casa de Simón llegaba una persona muy importante, el dueño de la casa iba a preparar una comida para agasajarlo.

 Y eso fue lo que la movió a dirigirse hacia ese lugar , tenia que ser muy cuidadosa que nadie se diera cuenta de su presencia y mucho menos Simón. Llego a la puerta de la casa se ve que el dueño tenia un buen pasar, por lo bonito que era ese lugar, entro al gran patio donde se veía un hermoso jardín, de una sala siente muchas voces se da cuenta que ese es el lugar donde están comiendo.

 Era la costumbre de esos tiempos que las mesas tenían patas cortas, se sentaban recostados sobre el brazo izquierdo mientras comían con la mano derecha, los pies iban hacia atrás y se quitaban el calzado.

 No tiene reparos y entra, lo hace con mucha precaución, tratando que las lamparas de aceite que servían de iluminacion no la delaten.

 Se ubica por atrás de Jesús, se postra sobre sus pies y las lágrimas comienzan a rodar por sus mejillas, rompe el frasco de perfume (dicen los historiadores, que era nardo puro traído de la India) y lo derrama sobre los pies del Maestro!!.

 Imposible pasar desapercibido con semejante fragancia!!! enseguida el lugar se lleno de un aroma muy agradable.

 Todos dejaron de comer giraron su cabeza y allí la ven: postrada a los pies de Jesús, vaciando hasta la ultima gota de ese nardo puro. ¡Que feliz se sentía! ¡Lo había hecho!¡ Ya no le importaba la mirada acusadora de los presentes!!!!¡Sabia que Jesús la estaba recibiendo!!

 Esta mujer dio lo mejor que tenia!!!!

Que cambios se producen cuando le entregamos al Señor lo mejor que tenemos,!!!!!! para ella fue el perdón de sus pecados, a la casa de Simón llego pecadora, pero salio transformada!!!!

 Se fue a su casa sin el frasco de nardo puro, sabia que lo había dejado en el mejor lugar, a los pies del Salvador!!!!

 Tu y yo le estamos dando lo mejor?????     Rompamos el alabastro de nuestro corazón y pongamoslo a sus pies!!!!!!

                                      Basado en el Evangelio de San Lucas 7: 36, 37,38